Una gran parte de los niños de todo el mundo están sufriendo de una obesidad que esta siendo imposible de controlar y surgen las preguntas acerca de quien es la responsabilidad: si de los padres, de los niños o de los alimentos que se distribuyen en cualquier lugar. Actualmente el porcentaje de niños con sobrepeso es muy alto y desafortunadamente es en los países desarrollados en los que más se presentan estos casos, sabiendo que tienen todos los medios para poder controlar los problemas nutricionales, educar a los niños y a los padres con respecto a la alimentación y para hacer un control acerca de los alimentos que pueden generar daño o aumento exagerado de peso. Si le preguntan a los padres o a cualquier persona, la responsabilidad de que un niño este gordo es de los alimentos y aunque tengan la razón en cierta parte, la culpa también es de los padres y de quienes los cuidan diariamente. El problema es que si se analiza el núcleo familiar de los niños obesos, se detecta que los padres u otros adultos también tienen este problema y así como están descuidados con su cuerpo, no se preocupan por el de sus hijos no por los daños que pueda haber en su salud.
Otro problema es que muchos de estos niños pueden quedarse solos durante el día y es cuando tienen un libertinaje en cuanto a alimentación o pueden volverse algo caprichosos con las personas que los cuidan ya que no son sus padres y pueden exigir, así que se enfocan en la idea de comer solo dulces, helados y frituras, incluyendo los paquetes y las bebidas gaseosas. Entonces no hay una disciplina y hacen lo que quieren en las tres comidas principales y viven picando todo el día alimentos poco nutritivos.Según un estudio norteamericano, los pequeños de cuatro años en adelante que tienen un régimen controlado en cuanto a la alimentación, que tienen un seguimiento y distribución racionalizada de la comida y que tienen hábitos de acompañamiento con los padres y hermanos mayores, tienen un riesgo menos de 40% de padecer de obesidad. También se tiene en cuenta el sueño y las horas adecuadas para hacerlo y el control de tiempo al momento de ver televisión.
La obesidad está causada por los hábitos que los seres humanos tienen, los padres educan a sus hijos de acuerdo a sus tradiciones y gustos y los pequeños siguen desafortunadamente los gustos alimenticios que no son tan benéficos. Es entonces cuando cada padre debe escoger que tanto debe consumir su hijo con hamburguesas, azucares, chocolate, o incluso la publicidad, porque aunque influye mucho, a los niños también se les puede persuadir de la idea que pueden ver en la televisión o escuchar en la radio.Otro punto en contra de la educación actual, es el constante sedentarismo, pues gracias a la tecnología y a la influencia de sus amigos, los niños prefieren estar todo el día enfrente de un televisor distrayéndose con videojuegos, en vez de salir al parque o a jugar con otros niños. Algunos padres se preocupan por que sus hijos no consumen fácilmente frutas o verduras y en este punto hay que saber innovar y atraer la atención y el paladar del pequeño, probando recetas y combinaciones con otros ingredientes para que sea más fácil y agradable de comer.