Se presenta un cuadro amplio y detallado del valor nutricional de las lentejas y las muchas enfermedades que puede prevenir su consumo habitual. Las propiedades y su composición dan muestra de su importancia como alimento.
La lenteja es uno de los más ricos y nutritivos alimentos, que se aproxima mucho a los alimentos completos, representado en 55 % de almidón, 25 % de proteínas y algunas grasas, fosfatos y cloruros. En hierro por ejemplo, contiene cerca de 8 miligramos por kilo.
Además de esto, posee tanino, por lo que resulta ser uno de los mejores reconstituyentes para el tratamiento de la anemia, así como tienen un efecto fortificante de los nervios para los que son convalecientes.
Estas propiedades tan benéficos disminuyen si las lentejas pierden su cáscara o si no están tiernas y frescas, por lo que lo mejor es consumirlas muy frescas, además de que parte de su sabor también se ve disminuido.
Son ligeramente laxantes y las más pequeñas poseen mejor sabor y producen menos gases intestinales a quien las consume, que las grandes.
Hay quienes aseguran que para quienes desean combatir la caída del cabello, se debe consumir dos platos de lentejas cocinadas con tomate o jitomate, por lo menos 4 veces a la semana.
Otra creencia muy popularizada en los países hispanoparlantes es que en la última noche del año, antes de que den las 12 de la noche, debe consumirse una porción de lentejas, con lo cual se asegura la suerte para los meses siguientes y garantiza que el dinero no le faltará a la persona que las coma.
Las lentejas pertenecen a la familia de las legumbres que por sus altos aportes nutricionales, son un alimento ideal, además de tener en casi todas las latitudes un costo muy pequeño para su adquisición.
Tiene una gran riqueza de vitaminas B1 y B2 y de minerales como, cobre, magnesio, fósforo, selenio, zinc y por supuesto, hierro.
Los principales valores nutricionales de las lentejas para una porción de 100 gramos son alrededor de 310 calorías, con un 50,8% de hidratos de carbono, un 23,5 % de proteínas, un 1,4% de grasas totales, un 10,6% de fibra, no tiene colesterol y de vitaminas tiene A, B1, B2, B3 y B6.
En cuanto a minerales, su composición es de sodio, potasio, calcio, fósforo, magnesio, flúor, zinc y por supuesto, el hierro que ya se ha mencionado.
Este cuadro minucioso de sus valores nutricionales, dan un panorama amplio de la importancia de incluir las lentejas en la alimentación habitual, ya que son garantía de equilibrio para la salud.