Se da una muestra detallada por componentes alimenticios y nutricionales para una dieta de un deportista promedio.
La primera necesidad de un deportista que se dedica a las competencias, es mejorar sus marcas, por lo que la alimentación cobra una vital importancia, lo que es bien conocido para los deportistas mismos, como también para sus entrenadores.
Energía
Las necesidades nutricionales dependen de varios factores como la edad, el estilo de vida, estado de salud, y en especial, del tipo de actividad física. La dieta debe ser equilibrada para conseguir un óptimo rendimiento deportivo y por lo tanto, la ingesta energética debe cubrir el gasto calórico y permitir al deportista mantener su peso corporal ideal.
Proteínas
Se recomienda que las proteínas supongan alrededor del 10-15% de la energía. Se comprende fácilmente que el deportista ansioso de mejorar su desarrollo muscular tenga la tentación de exagerar la ingesta de proteínas, pero las necesidades no superan los 2 g de proteínas por kg de peso por día.
Grasas
El consumo ideal de grasas en deportistas debe ser de un 30-35% de las calorías totales. Tanto un exceso como un aporte deficitario de grasa pueden desencadenar efectos adversos para el organismo.
Hidratos de Carbono
Las recomendaciones de carbohidratos para deportistas son de 50-60% del total de las calorías ingeridas, correspondiendo menos del 10% a los hidratos de carbono simples como el azúcar y los dulces y el porcentaje restante a los hidratos de carbono complejos en cereales y derivados, verduras, patatas, etc.
Agua
En condiciones normales, necesitamos alrededor de tres litros diarios de agua para mantener el equilibrio hídrico, un litro y medio en forma de bebida y el resto a través de los alimentos. En caso de un esfuerzo físico importante las necesidades de agua aumentan, pudiendo perderse hasta más de dos litros por hora. Es aconsejable, beber antes, durante y después del ejercicio físico, sobre todo en los deportes de larga duración.
Minerales
Las mujeres con una gran actividad deportiva, en las que suele producirse ausencia de la menstruación, las necesidades de calcio aumentan y hay que incrementar el aporte de este mineral para compensar sus bajos niveles de estrógenos y su menor absorción intestinal de calcio. Por lo que se recomienda una alimentación rica en productos lácteos, leche, queso, yogur.
Vitaminas
En lo relativo a las vitaminas, se ha demostrado que la capacidad física disminuye cuando hay una carencia de las mismas. A partir de este hecho se ha extendido la creencia de que un suplemento vitamínico puede incrementar el rendimiento en una práctica deportiva. Pero todos los estudios realizados hasta ahora han llegado a la conclusión opuesta: una adición de vitaminas no mejora el rendimiento físico.
Un aporte adicional de vitaminas sólo puede ejercer un efecto beneficioso en el rendimiento de las personas que tengan un déficit vitamínico. Pero éste no es el caso de la persona alimentada de forma equilibrada.