¿Qué alimentos se pueden comer crudos? Aprende las reglas para no correr riesgos innecesarios con tu salud!
Comer alimentos crudos puede ser una elección amiga de la salud.
Las verduras, hortalizas y frutas crudas, mantienen intactos sus principios activos, en particular, vitaminas, minerales y antioxidantes.
Pero, en el caso de otros alimentos, la cocción es la mejor elección que se puede hacer.
Algunos alimentos, si se comen crudos, pueden ser peligrosos para la salud. Entre los ejemplos más comunes se encuentran las setas que, en algunos casos son comestibles sólo después de la cocción.
Pero también el pescado puede ser peligroso.
Muchos productos ictícolas pueden estar contaminados con parásitos dañinos para los seres humanos, y entre los más peligrosos se incluyen el Anisakis, el Diphyllobothrium latum y el Opisthorchis
Esto no significa necesariamente tener que renunciar para siempre a sushi, sashimi, tartar o pescado marinado.
Más bien, para minimizar los riesgos, es recomendable comer el pescado crudo sólo si se ha congelado durante al menos 24 horas a -20 ° C o por lo menos durante 96 horas a -18 ° C.
Las bajas temperaturas matan los parásitos
En el caso de mejillones crudos los riesgos incluyen:
– bacterias, tales como Salmonella o Escherichia coli
– virus, como el de la hepatitis A
En este caso, los riesgos pueden reducirse comprando estos alimentos a través de canales seguros que garanticen el cumplimiento de las leyes destinadas a proteger a los consumidores.
Además, se recomienda respetar siempre la cadena de frío durante el transporte a casa y consumir estos productos lo antes posible.
Un poco de limón no es suficiente
La creencia de que los riesgos asociados con el consumo de mariscos crudos se pueden prevenir rociándolos con jugo de limón es falsa: el ácido cítrico no es suficiente para matar a los parásitos!
Finalmente, la carne. La mejor opción es una cocción adecuada, especialmente cuando se trata de animales de caza. De esta manera se evita los riesgos con la tenia (Taenia solium) y otras zoonosis (como la Taenia saginata o Trichinella spiralis).
