Las alergias alimenticias son muy comunes y pueden ser de diferentes niveles, pero depende de cada organismo poder asimilarlo rápidamente o asistir definitivamente al medico para someterse a un tratamiento. Hay ciertas personas que desarrollan alguna especie de alergia a determinados alimentos y que empieza a generar manifestaciones sobre todo en la piel, aunque depende del tipo de reacción, porque el rechazo puede llegar a generar hasta a afectar la parte respiratoria de una persona. Esto es llamado intolerancia y puede reflejarse por medio de diversas manifestaciones, como la indigestión, el estreñimiento, cólicos, acidez o gastritis, inflamación en las vías respiratorias o aparición de ciertas ampollas por mecanismo de sistema inmunológico.
Frecuentemente se da por productos lácteos, por productos a base de maíz o el maíz mismo o alimentos que tengan gluten, derivados del trigo y a partir del cual se genera el grupo de los celiacos, que son quienes son intolerantes a los alimentos que tienen gluten. Todo tipo de alimento puede ser alérgico a cualquier persona, pero los casos varían, por ejemplo, hay niños que son alérgicos a los huevos, independientemente de la preparación, o hay personas que son alérgicas al mismo alimento pero solo cuando se consume frito. El pescado resulta un alimento que produce alergia para los adultos y la leche para los niños cuando nacen y debe hacerse un tratamiento a base de toros alimentos y químicos para responder a las necesidades de calcio y otros componentes que da la leche y más cuando es a temprana edad.
A los adultos también los afecta y puede ser a la lactosa lo que desencadena inflamación en el estomago y aparición de diarreas y malestares estomacales. El maní siempre ha sido muy nombrado hasta el películas y realmente si logra tener este tipo de efectos en las personas que no lo pueden asimilar, así como los camarones o los mariscos o los frutos secos. Hay otros elementos que no son propiamente alimentos pero que si hacen parte de los ingredientes de las preparaciones y son las salsas o los condimentos que se añaden, las cuales pueden resultar perjudiciales para quien las consume. Lo primero que se afecta es la boca y puede llegar a ampollarse o a hincharse dependiendo de la reacción y el nivel de intolerancia. Los síntomas se manifiestan después de algunos minutos o puede tardar hasta dos horas en aparecer. Algunos de los mas crónicos llegan a abarcar mareos, desmayos, vomito y ahogo.
Lo mejor, si es la primera vez, es acudir al médico para que realice exámenes de sangre con los cuales se confirma si hay algún tipo de alergia a lo que se consumió y desde este punto ya quedan totalmente prohibidos para un futuro. También se utilizan dietas de eliminación para descartar de a pocos ciertos alimentos que puedan hacer daño, porque no se tiene la certeza de cuales son exactamente, se dejan de consumir un tiempo y se vuelve a ingerir para verificar si es el responsable y cómo reacciona el cuerpo. Desafortunadamente el único tratamiento de control es no comer los alimentos que producen el malestar pues lo único que se medica y se aplica son inyecciones y otros fármacos para controlar los efectos pero no para erradicar la alergia.