Obtener un cuerpo con mayor volumen y saludable gracias al ejercicio, no requiere únicamente del uso de pesas y maquinas con mucho peso. Basta con dedicarse a hacer algunos ejercicios sencillos pero que requieren perseverancia, para que los resultados empiecen a verse. Tener un cuerpo perfecto y tonificado no necesariamente requiere de maquinas o pesas, lo cual es el error en el que caen la mayoría de personas y dejan de lado las actividades comunes de trabajo sin tanto esfuerzo, y se dedican exclusivamente al manejo de pesas para obtener unas piernas o brazos marcados. Lo que hay que entender es que las pesas y otro tipo de elementos funcionan como ayudas o apoyos para que el ejercicio de resultados más rápidos.
Unas de las soluciones más rápidas es caminar y trotar por el parque o la plata, por un sendero, pero hacerlo. Lo que se logra es activar la circulación y mejorar poco a poco la apariencia de las piernas. Cuando se hace en un lugar como la playa, es favorable el terreno generado por la arena, pues el esfuerzo que se hace al correr es más alto y los resultados son mucho mejores. Al principio puede ser de 10 minutos la actividad, pero puede irse incrementando hasta llegar a los 60 o más minutos.
Las sentadillas son un ejercicio perfecto para aquellas que quieren tener unas piernas y derrier de infarto. Hay que recordar que las sentadillas se hacen de manera correcta cuando se separan las piernas, se mantiene la espalda recta y se baja hasta generar con las piernas un ángulo de 90 grados. Para aumentar el volumen de las piernas, es bueno que al bajar, se mantenga la posición por unos segundos. Hay que empezar con sesiones de 4 repeticiones, 8 veces cada una. Si se hacen tres veces por semana como mínimo, los efectos serán notorios.
Las abdominales representan otro de los ejercicios clásicos para poder obtener musculatura y resistencia. Unas de las más practicadas son las isométricas, es decir, las que se practican acostados en el suelo, con los brazos relajados y al lado del cuerpo. Se levantan las piernas hasta que el cuerpo logre un ángulo de 90°. Se empiezan a bajar las piernas de manera lenta, pero no se permite que se toque el piso, se vuelven a levantar y de nuevo se bajan de manera lenta. La idea es hacerlo lento y con resistencia, para que sea más efectivo. Este tipo de abdominales son aconsejadas para que no se presenten daños en la columna.
Los brazos son uno de los puntos que más debilidad presentan y no solo al aplicarse sino que se nota por la flacidez que presenta en los músculos. Para poder tonificarlos, hay que tomar una pelota pequeña, de las que se emplean para actividades anti estrés. Basta con ponerla entre ambas manos, levantar ambos brazos y hacer presión como si se estuviera aplastando. Este ejercicio tonificará, además de los brazo, el busto.