Quién podría pensarlo, pero las células responsables del cáncer también se alimentan y lo hacen a partir de los alimentos que menos se piensa o que se consumen con bastante frecuencia. Además es positivo cambiar el estilo de vida para contrarrestar los efectos de la quimioterapia y la aparición de nuevos tumores. Según recientes estudios y después de años de hipótesis establecidas, es conocido que todas las personas presentan células cancerígenas en su cuerpo, solo que algunos organismos las desarrollan y otros no. Cuando no son detectadas es porque son muy pequeñas y poco dañinas para el cuerpo. Todo depende también del sistema inmunológico de la persona, pues si es muy fuerte, impide que las células se multipliquen y por ende, que se formen tumores.
En la mayoría de casos cuando las personas presentan cáncer es porque tienen una deficiencia nutricional y es sobre todo por los cambios de los estilos de vida que se llevan que generalmente son erróneos y poco saludables. De acuerdo a las investigaciones clínicas, las células cancerígenas se alimentan de ciertas cosas que al dejar de ser consumidas, pueden afectar el desarrollo de estás y que mueran de “hambre”.
Generalmente las personas con cáncer se someten a quimioterapias y radioterapias que al quemar o envenenar las células malignas termina afectando a las sanas y de una u otra manera dañando órganos y después de un tiempo perdiendo efectividad y permitiendo que los tumores se multipliquen rápidamente.
Por eso es recomendable dejar de consumir determinados alimentos sobre todo mientras se lleva el tratamiento, estos son:
– El azúcar, pues es de los primeros agentes que alimentan a estas células. Es recomendable consumir miel de abejas como endulzante pero en bajas cantidades.
– La leche entera causa mucosa sobre todo en el área gastrointestinal y el cáncer se alimenta de ella, por eso es preferible con sumir leche de soya preferiblemente sin azúcar.
– Los ambientes ácidos también favorecen el desarrollo de estas células y la carne de res o cerdo crea este tipo de ambientes además de tener hormonas y parásitos que provocan otro tipo de enfermedades, es entonces cuando en la dieta se debe incorporar carne de pescado o de pollo.
– Un método efectivo para generar un ambiente alcalino, es decir, contrario al acido, es el consumo de frutas y vegetales, cereales y jugos, aproximadamente un 80% de toda la dieta pues todos ellos aportan enzimas que nutren las células sanas del cuerpo.
– La cafeína contenida en el café, el té y el chocolate también debe ser controlada y es necesario evitar este tipo de bebidas. Se puede sustituir con té verde o agua.
Hay que tener en cuenta que para complementar este proceso es importante tener una mentalidad positiva, pues el cerebro también ayuda a eliminar poco a poco la actividad de estas células dañinas. Por el contrario si solo se manejan emociones de ira y depresión se genera estrés y tensión. Hacer ejercicio y adquiriendo el hábito de respirar en lugares como parques o que tengan bastante oxigenación también es muy benéfico. También hay recomendaciones básicas para la preparación y uso de utensilios, por ejemplo, no colocar botellas de agua en el congelador o no usar plástico en el microondas, pues se liberan toxinas que se adhieren a los alimentos que van a parar a las celular del organismo.