Las plantas medicinales pueden ayudar a reducir los padecimientos o síntomas cuando se inflama la próstata y respaldar el procedimiento medico que se debe tomar obligatoria y urgentemente. Muchos hombres después de determinada edad empiezan a padecer problemas de inflamación en la próstata y por ende sufrir con los efectos secundarios que pueden ir desde el dolor, la incomodidad y la imposibilidad de ir tranquilamente al baño. Esta enfermedad es llamada prostatitis. Las causas son principalmente responsabilidad de infecciones bacterianas en los conductos de la próstata las cuales son mucho mas frecuentes en los hombres mayores de 50 años, pues son menor fuertes ante la presencia de una infección.
Normalmente se presentan con unos síntomas previos a la inflamación que abarcan fiebre, escalofríos, malestar abdominal o pélvico, dolor entre el ano y la próstata y ardor cuando se va al baño. También puede presentarse unas intensas y frecuentes ganas de orinar, si es grave hay una disminución en el chorro urinario, el dolor en los testículos es fuerte y a veces puede haber sangrado en la orina. Por obvias razones, no hay un interés en las actividades sexuales, las erecciones o las eyaculaciones si las hay suelen ser dolorosas y la impotencia suele presentarse con frecuencia mientras el problema no sea tratado. Ante una enfermedad grave lo primero que se debe hacer es buscar la ayuda de un medico para que descarte problemas graves y pueda tratar raídamente con un tratamiento, pero para respaldar el proceso, se puede hacer uso de las hierbas medicinales que además de minimizar los efectos secundarios, pueden ayudar a controlar la infección y que la curación sea más pronta.
Lo que si hay que tener en cuenta es que no todos los organismos masculinos son iguales y así como un remedio natural puede ser efectivo para uno, puede ser nulo o contraproducente para otro. Además siempre hay que recordar que todo en exceso es malo y algunas plantas no son la excepción, así que hay que consumirlas en ciertas cantidades.
– Hay una mezcla que se puede hacer a base de hojas de anamú, caléndula y cordoncillo, la idea es hervir un litro de agua hasta que hierva y cuando lo haga, se introduce una hoja de cada una de las plantas nombrada antes más dos flores de caléndula. Se deja enfriar, se cuela y se toma un poco de la bebida, todos los días en ayunas. Hay que tener cuidado con las hojas de anamú, pues en exceso es una planta toxica.
– Hacer una infusión de cola de caballo mas semillas de abeto y beber la todos los días. Se puede acompañar el consumo de esta bebida con la aplicación de vapores de caléndula en la zona afectada.
– Otro baño recomendado para esta zona se prepara con 6 cucharadas de flores de malva, y también se puede tomar esta preparación antes de todas las comidas.
– Una última opción puede darse a través de los jugos que son una excelente terapia y los más recomendados son medio jugo de calabaza, de tomate y de uva cocinada, se mezclan y se toma entre 3 y 4 veces al día. Para los que tengan problemas con el sabor, lo pueden endulzar con un poco de miel.