Un malestar que aqueja a millones de personas, y que trae como consecuencia el no poder seguir adelante con las actividades diarias. Por suerte, hay maneras de solucionarlo o intentar evitarlo?? ¡sólo hay que tomar algunos recaudos! ¿Qué se puede hacer para no sufrir más del dolor de espalda? Hay muchas opciones sobre actividades y/o hábitos que se pueden llevar adelante para evitar, o por lo menos intentar, dejar de sufrir el dolor de espalda. Aquí algunas ideas:
• Realizar ejercicios habitualmente para lograr mantener un cuerpo fuerte y sano.
• Hacer natación.
• Respirar profundamente y relajarse por momentos, descansando la columna.
• Buena postura: En horas de trabajo, por ejemplo, frente a la computadora, o levantando un peso excesivo (para este último caso, se puede usar un faja).
• Para dormir usar un colchón lo bastante firme. En cuanto a la almohada, debemos elegir una baja para no obligar al cuello a estar en una mala posición. Hay dos maneras que son las más adecuadas para la hora de descansar: la ¨posición fetal¨, y hacia arriba con una almohada debajo de las rodillas. No es recomendable dormir boca abajo, ya que esta posición obliga a poner el cuello hacia un costado, y esto suele generar contracturas en esa zona.
• Al vestirse o al ponerse los zapatos se debe permanecer sentado y traer las rodillas hacia el cuerpo, acercando los pies.
• Al sentarse es necesario hacerlo con cautela y no dejándose caer.
• Para levantarse de la cama, primero hay que sentarse lentamente y no de un solo golpe, para luego incorporarse. Al acostarse realizar los mismos movimientos a la inversa.
• Para lavarse las manos, los dientes o la cara, en general hay que agacharse hacia la pileta. En este caso, lo que debemos doblar son las rodillas y no la columna. Para lograr esto más fácilmente podemos apoyar una mano sobre la pileta.
• A la hora de ir al supermercado es recomendable ir con un carrito, para luego llevar los insumos en él y no cargando el peso de las bolsas.
• Para las actividades de limpieza del hogar, en donde más se exige el esfuerzo de la espalda, se debe tener en cuenta la altura de los instrumentos que se usarán para cada labor: para barrer, la escoba debe llegar al suelo sin tener que inclinarse para eso. Por otro lado, se debe hacer la fuerza con los brazos y no con la cintura. Para planchar, la tabla debe quedar más alta que la cintura. Si debe agacharse en algún momento, flexionar las rodillas y no doblar la columna. Para acomodar la cama, mantener las piernas un poco separadas para lograr una mejor estabilidad, igualmente en el caso de estar fregando la ropa. Si para esto se usara el lavarropas, ponerse en cuclillas para meter la ropa sucia.
Siguiendo estas recomendaciones, será más fácil no llegar a la contractura y los dolores intensos que ésta genera. Así, se podrá mantener una rutina mucho más fácil de llevar a cabo cada día.