No es un pecado consumir una copa de alcohol, pero cuando se hace en exceso, puede que se presente la resaca y sus respectivas consecuencias, que pueden ir desde afecciones físicas hasta acciones que afectan la tranquilidad de otras personas. Es una sensación que ha experimentado muchas personas después de una noche de diversión y consumo de alcohol, pero la verdad no es nada agradable. A cada persona la resaca la puede atacar de manera diferente, pero siempre todos los síntomas son muy molestos y demoran algún tiempo en desaparecer, además que cuando se presentan de manera frecuente, empiezan a aparecer problemas de salud. Hay que tener en cuenta que hay dos tipos de resaca, la común que es la que la mayoría de personas vive y que tiene los síntomas comunes, pero la segunda es la que tiene que ver con la intoxicación y el exceso de consumo de alcohol, en donde puede haber un riesgo muy alto de perder la vida.
– El síntoma mas común es el dolor de cabeza y muy fuerte. Casi el 80% de las personas lo presentan, y se caracteriza por tener algún tipo de punzadas o saltos al interior de la cabeza, haciéndolo aún más molesto.
– Después vienen las molestias estomacales y las que tienen que ver con la afección en el colon y los intestinos. El resultado son las nauseas y las ganas de vomitar, para poder expulsar la mayoría del alcohol. También puede aparecer síntomas como diarrea, pero en realidad todos varían de persona a persona y así como pueden ser leves, pueden ser muy fuertes.
– Hay personas que no tolerar muy bien el alcohol en su cuerpo y es por eso que empiezan a aparecer algunos trastornos sicóticos, en donde puede haber alucinaciones y situaciones delirantes. Siempre se nota ansiosa y nerviosa cuando se encuentra en este estado y cuando es muy grave el caso, los síntomas desaparecen pasado casi un mes. El animo también es otro aspecto que se ve afectado y por lo general el estas sustancias hacen que una persona que este feliz y motivada, pierda su ánimo, su placer al hacer actividades y lo empieza a inundar una infinita pereza y ganas de dejar todo abandonado. Cuando una persona se obsesiona con el consumo de alcohol, puede empezar a ver afectada su vida social, familiar y laboral.
– Una persona que consume mucho alcohol, se vuelve muy agresiva, compulsiva y puede caer en la agresión a otras personas. En la mayoría de casos son hombres lo que comenten este tipo de acciones, pero algunas chicas también lo hacen.
– Cuando se está bajo los efectos de estas bebidas, puede que no se sepa con certeza lo que se hace y más porque los sentidos pierden su estabilidad y buen funcionamiento. Precisamente es por esto que se presentan accidentes de tránsito o caseros.
– La atención, concentración y el trabajo intelectual, empiezan a perder calidad y muchas veces puede pasar por comportamientos penosos o ridículos por no saber lo que se dice, no entiende lo que otras personas le preguntan y no puede responder ante situaciones básicas.