Los zumbidos en los oídos son comunes, pero pocos logran mantener la calma y no querer hacer algo para quitarlos. Aunque no se sabe con exactitud el origen de esto, si es posible controlarlos o que no se presenten de manera frecuente. A muchas personas les pasa que sienten un sonido agudo y extenso en los oídos, que les hace doler la cabeza y por más que fuercen y aprieten un poco los oídos, se sigue escuchando, pero en realidad es bastante molesto. Aunque si de sonidos se trata, no solo hay zumbidos afectando al oído, porque puede tratarse de otros ruidos que aunque no tienen una fuente sonora, logran desesperar a quien los escucha, así este en el silencio mas profundo. Entonces puede haber desde silbidos, pitidos, rugidos o algún tipo de chirrido.
Científica o medicamente es llamado tinnitus, y puede tener una intensidad leve o fuerte y se puede prolongar por algunos segundos o incluso minutos. Pero para quienes lo sufren, es complicado mantener un nivel de concentración alto si se está trabajando o llega a ser mucho peor para quienes quieren conciliar el sueño y justamente aparecen estos sonidos molestos y perturbadores. A pesar de que se han hecho estudios e investigaciones, aún no es claro el origen o la causa de este tipo de sensaciones, pero puede inclinarse por algún tipo de malestar en esta zona, por ejemplo, las infecciones en el oído, acumulación de cera, presencia de cuerpos extraños o por alteraciones en el odio cuando hay exposición constante a sonidos muy fuertes, como una discoteca o un concierto.
De acuerdo a algunos médicos, el consumo frecuente de alcohol, de cigarrillo, de cafeína desmedida, de antibióticos y algunos medicamentos, puede llegar a causar este tipo de ruidos. A veces las personas pueden confundirse con sonidos bajos en el hogar, como el ruido del reloj o música aguda y a bajo volumen, pero en la mayoría de veces se presenta en la noche a la hora de ir a dormir. Incluso algunos electrodomésticos producen ciertos ruidos que se confunden con el tinnitus.
Pero cuando se presente y de manera seguida, hay que empezar a seguir sencillos pasos para minimizar el efecto y erradicarlo. Ayuda mucho mantener un nivel de relajación muy alto todos los días, porque el estrés puede hacer que el cuerpo se altere y que estos sonidos se presenten. Hay que descansar por lo menos unas 8 horas y que la cabeza se ubique en una posición un poco elevada para que la cabeza no esté tan congestionada. Por último, si se trabaja en lugares con alta contaminación auditiva, como las obras en las calles, hay que emplear elementos de protección.