Las enfermedades en las épocas dicembrinas abundan por la falta de cuidado tanto en la alimentación y la higiene. Si se ha adquirido alguna enfermedad, lo mejor es aislarse para no contagiar a los demás. Estas épocas pueden ser propicias para adquirir algún tipo de gripe o contagio de alguna enfermedad, sobre todo en las zonas de clima frio o en donde cae mucha nieve. Por eso hay que seguir algunos pasos que aseguraran que el cuerpo tenga las defensas suficientes y evitar pasar en cama todas estas fechas importantes.
Lo primero es mantener una alimentación saludable porque en el exceso en estas fechas es muy alto, sobre todo de aquellos alimentos refinados, ricos en grasa, azucares y harinas o condimentos. El resultado es que la oxigenación del cerebro sea más lenta y por ende los movimientos y el bienestar del cuerpo. En el caso de un alto consumo de azúcar, se genera una interrupción en la absorción de proteínas y nutrientes.
Como segundo paso, hay que mantener la temperatura corporal regulada y evitar las subidas de presión. Para el frio, hay que emplear abrigos o chaquetas que eviten que el cuerpo pierda su temperatura. Si es posible, hay que usar guantes, bufandas y algunos gorros. La higiene es esencial, para evitar el esparcimiento de gérmenes. Todos los días hay que bañarse, el lavado de mano es esencial en cada momento y sobre todo si se ha tenido contacto con el exterior. También cuando ha habido contacto con animales, dinero o superficies sucias. La limpieza en la piel, permite que se alejen las bacterias, hongo s y/o infecciones que puedan generar enfermedades.
El estrés puede ser un agente que desencadene enfermedades por la alteración hormonal que genera, sobre todo el cortisol. Lo primero que ocurre es que el nivel de defensas baje y sea fácil para los agentes infecciosos generar alguna enfermedad. Si hay personas enfermas, hay que evitar el contacto permanente porque será fácil que la enfermedad se contagie. Si es la propia persona la que está enferma, lo mejor también es aislarse, para que los demás no se enfermen.
Por último, hay que evitar el contacto frecuente con el rostro, pues es por medio de la nariz o los ojos, por donde suelen adquirirse la mayoría de enfermedades o infecciones. Siempre hay que mantener las manos limpias, usar pañuelos o papel higiénico y un jabón en gel que pueda usarse en cualquier lugar.