El vino es una bebida por excelencia para el consumo después de las comidas pero ademas tiene fuertes componentes que ayudan a mejorar la salud en muchos sentidos específicamente la cardiovascular. Pero como es una bebida alcohólica hay que tener ciertas precauciones porque no puede ser bebida por cualquier persona. 
Según las recomendaciones de muchos especialistas de la salud, el vino se ha convertido en una bebida benéfica para la salud. Pero hay que evaluar los diversos tipos de vino para saber cuál es el más conveniente pues los lugares de origen son diversos, los procesos, los sabores y los ingredientes. Hay que diferenciar el consumo de una copa de vez en cuando para el bienestar corporal con el consumo desmedido y la generación de daños por el exceso. El vino con un consumo controlado aporta antioxidantes los cuales actúan para controlar ciertas enfermedades y la producción de radicales libres que son los causantes del cáncer.
Uno de los más conocidos es el vino tinto y según estudios, el consumo de una copa diaria ayuda al sistema circulatorio además de tener elementos como vitaminas que reducen los signos del envejecimiento y aportan beneficios para que la piel esté sana y bella. Después de las comidas es saludable para la digestión sobre todo después de comer pescados o carne que suelen ser alimentos un poco pesados y que generan llenura. Por ser una bebida alcohólica y con ciertos niveles de concentración de alcohol tiene ciertas reglas de consumo por ejemplo solo deben ser consumidos por los adultos y que sepan que no tengan contraindicaciones al beberlo, como los diabéticos cuando el vino es dulce, las mujeres embarazadas o las que están amamantando.
Es bueno beberlo despacio y degustarlo, pues si se toma muy rápido puede generar mareos y por consiguiente quedar medianamente ebrio. Por eso es que hay que tomar una o dos copas como límite para no generar estas alteraciones en el sistema nervioso. No debe ser tomado en ayunas porque su objetivo es acompañar las comidas especialmente el almuerzo o la cena. También hay que aclarar que no es necesario consumir licor si se es una persona que no lo hace, los mimos beneficios que otorga el vino los generan las uvas, que es la fuente principal de su obtención.De acuerdo a investigaciones realizadas, el vino ha sido recomendado para evitar las enfermedades relacionadas con el corazón, la reducción de presencia de infartos pues actúa de tal manera que las arterias se desinflaman y se limpian un poco.
También ayuda a reducir la formación de coágulos e incrementa los niveles de colesterol bueno. Otros tipos de bebida que también benefician la salud cardiaca son el vino blanco e incluso la cerveza. Pero hay que tener en cuenta aquellos grupos de personas que no pueden consumir vino y mucho menos en exceso porque también tiene sus lados negativos como por ejemplo, el aumento de acido úrico en la sangre, aporta grandes cantidades de calorías al cuerpo y por ende ayuda a subir de peso y por ultimo puede contaminar muchísimo el hígado y más si se es un consumidor excesivo de bebidas alcohólicas. Esto es con sentido preventivo pero hay otros casos en los cuales hay personas ya diagnosticadas con ciertas enfermedades las cuales deben dejar de lado el hábito de beber como por ejemplo, quienes sufren de gota o quienes tiene hipertensión.
