La gaseosa puede saber muy rico y poder calmar la sed rápidamente, pero es un enemigo silencioso para la salud pues activa numerosos problemas para salud, poniéndola en riesgo. 
Las bebidas gaseosas son las preferidas a nivel mundial para calmar la sed, para una reunión, para los cocteles, pero son muchos los inconvenientes y los problemas de salud que pueden generar por su consumo, sea bajo o alto. El principal es que son ricas en fósforo, cosa que impide que el zinc o el calcio puedan ser absorbidos correctamente, lo que puede provocar diversas enfermedades.
Según los nutricionistas y por estas razones, lo que nunca hay que hacer es dar de beber gaseosas a los niños porque están en crecimiento, a las mujeres embrazadas por su condición de madre y de tener un bebe en desarrollo, ni a las personas de la tercera edad porque tiene un desgaste y deficiencia en absorción de minerales y el consumo de estas empeora su condición. Otro problema es el alto contenido de azúcar y con un solo vaso puede ser suficiente para empezar a desencadenar reacciones adversas en el cuerpo. El alto consumo de estas bebidas son una de la razones para que se presente la diabetes en personas muy jóvenes, sin contar con los componentes que tienen estas bebidas, sobre todo las oscuras, que son las responsables de algunas perforaciones de tejidos y problemas gástricos.
La dificultad radica en la publicidad, porque a pesar de que hay estudios que certifican todos los peligros que se provocan por su consumo, los medios de comunicación , el marketing y sobre todo la industria hacen que todo se mantenga en cierto secreto, pues sería un gran desastre el hecho de que el mundo entero dejara de consumir gaseosa. Siempre antes de beber una gaseosa hay que analizar sus componentes y evaluar que muchos de ellos son los que hacen sentir malestares de todo tipo y peor si se generan dependencias. A veces es mejor reemplazarlas por agua gasificada pero aún mejor es beber agua pura, sin procesos, sin aditivos, sin componentes artificiales.
Según las investigaciones realizadas, los países con mayor consumo de gaseosa son Argentina, donde calcularon que solo una persona puede beber casi 131 litros al año, lo cual es una cantidad escandalosa. Le siguen Chile con 121 litros, México es tercero con 119 litros por persona, increíblemente Estrados Unidos ha bajado al cuarto lugar con un promedio de 112 litros por persona al año, Noruega con 91, Bélgica con 87 y Uruguay con 87. De acuerdo a lo que significa la gaseosa en medio de la sociedad, esta vista como un líquido que consumen las personas que no tiene grandes ingresos y que las consumen para disfrutar de momentos junto a su familia.
