El azúcar blanco es mala para la salud y la línea. Como se ha señalado a menudo, debe ser eliminada, así como la harina blanca. ¿Pero cuáles son los sustitutos más naturales y saludables? De hecho hay muchos edulcorantes que se encuentran en la naturaleza que no hacen daño, sólo hay que aprender a usarlos.
Entre los más famosos está la miel que, sin embargo, debe absolutamente evitarse durante el primer año de vida de un niño. La miel, además de ser un antibiótico natural, también es rica en antioxidantes, vitaminas, calcio, potasio y magnesio.
También es muy buena la malta, que se obtiene de la fermentación de granos, como el maíz, el mijo, el trigo, la cebada, el arroz o la avena. El sabor es diferente según el cereal que se elija.
Otro endulzante que se puede preparar en casa es el jarabe de manzanas. Cocinar manzanas en agua hasta que estén tiernas; retirar y utilizar el agua, una vez frío, incluso para endulzar los pasteles. Además, hace bien a los niños, ya que contiene vitaminas y minerales, y combate el estreñimiento, típico de la fase de destete. Tenga cuidado al prepararlo de no agregarle azúcar, en todo caso, una cucharada de miel (siempre para niños mayores al año).
El jarabe de arce se utiliza mucho en los Estados Unidos y es una salsa muy dulce, similar al caramelo, que se consume con helados o postres. Para algunos es muy empalagosa, pero hay que admitir que es rica en minerales.
También está la melaza, que se obtiene a partir de remolacha o caña de azúcar. Es un poco difícil de encontrar.
Otro edulcorante natural es la stevia: esta planta tiene un alto poder edulcorante, a pesar de un cierto gusta a regaliz.