Aquí tienes algunos datos importantes que debes conocer sobre los mariscos. 
Los mariscos son muy ricos en yodo, oligoelementosy un gran número de otros agentes nutritivos. Pero vamos a examinarlos uno tras otro.
Laminaria: es un tipo de alga que crece a 50-60 pies del fondo del mar. Contiene minerales (sales, potasio, magnesio, fósforo, hierro, aluminio, yodo, bromo y otros)a. La laminaria es también rica en vitaminas A, C y grupo B.
Este producto se recomienda para las personas con trastornos en el funcionamiento de los riñones y trastornos del metabolismo. Compuestos yódico se prescriben a las personas con problemas del corazón, la glándula tiroides y la aterosclerosis. Sólo tener en cuenta que más de 0,66 libras de producto al día, puede causar trastornos digestivos.
Camarones: al igual que los cangrejos son ricos en proteínas, minerales y casi no contienen grasas. El yodo contenido en ellos es 100 veces más que en la carne. La carne de camarón también tiene una gran cantidad de vitamina B12 que es indispensable para el desarrollo de la hemoglobina y el mantenimiento del sistema nervioso.
Ostras: gracias a la alta tasa de vitaminas del grupo B y D refuerza la estructura de los huesos. También son ricas en zinc, uno de los nutrientes requeridos para la producción de la testosterona.. Esto significa que son saludables para los hombres como una ayuda en la función reproductiva. Coma sólo ostras frescas rociadas con jugo de limón.
Mejillón: los mejillones son ricos en selenio (protección del organismo contra el cáncer), sodio, potasio, calcio, magnesio, yodo, boro, cobalto y manganeso.
Este mineral es un gran estimulante para los procesos de formación de la sangre, y toma un papel activo en la síntesis de vitamina B12 y activa la formación de algunos fermentos. Se recomienda comer mejillones no más de 3 veces a la semana.
Calamares: al igual que sus hermanos los pulpos, los calamares son ricos en proteínas. La carne de calamar tiene vitamina C, grupos de vitaminas B y muchos otros microelementos que ayudan al desarrollo del jugo digestivo y a abrir el apetito. Una característica especial de los calamares está en su cocción. Se dejan cocer durante sólo 5 a 10 minutos o, pasado ese tiempo, continuar la cocción de 45 minutos a 1 hora, de lo contrario se arriesga a que su carne quede dura.
