Si el ajuste de tu dieta y el ejercicio no han ayudado a que llegues a un saludable peso corporal, entonces puedes tener hipotiroidismo o una glándula tiroides poco activa. Afortunadamente, puedes ayudar a normalizar la glándula tiroides aumentando la ingesta de yodo.
El yodo es esencial para la formación de la hormona tiroidea en la glándula tiroides. Las personas que tienen dificultad para bajar de peso a pesar de que comen pequeñas porciones de alimentos, pueden conseguir resultados con el yodo.
Los síntomas de deficiencia de yodo
La deficiencia de yodo puede dar lugar a un cabello quebradizo, pérdida de cabello, falta de tono en la piel, niveles bajos de energía, dificultad para lidiar con los cambios de temperatura ambiental, falta de concentración, estreñimiento, depresión y fatiga extrema.
Además de la función tiroidea, los síntomas de deficiencia de yodo son la depresión, aumento de peso, pulso débil, resequedad en el cabello y la piel, hinchazón de las piernas, disminución de la capacidad de concentración, calambres musculares, hinchazón o inflamación de los ojos y dolores crónicos.
La fatiga es un síntoma común, caracterizado por la necesidad de conciliar el sueño cuando no se activa. Hipersensibilidad al frío o frío en las manos y los pies, es otro de los síntomas frecuentes.
Funciones del yodo en el organismo
La falta de yodo puede causar cambios en la glándula tiroides que conduce directamente a una mala función del metabolismo y la inmunidad. La deficiencia de yodo favorece el daño de los radicales libres en la glándula tiroides, que pone a la propia glándula en riesgo. Así, varios compuestos se acumulan en la glándula, como el flúor, el perclorato y bociógenos. La contaminación ambiental agrava significativamente esta falta de yodo que se refleja en todo el cuerpo.
El yodo se encuentra en alta concentración en los ovarios y el tejido mamario, actuando como una barrera a la estimulación del crecimiento del estrógeno y como promotor del metabolismo de los estrógenos. El yodo contribuye al funcionamiento de los receptores hormonales en el cuerpo, ayudando a las hormonas a comunicarse más eficazmente. La hormona tiroidea regula la tasa de formación de otras hormonas y por lo tanto rige la función sexual.
El yodo también es esencial para el desarrollo adecuado del cerebro y la capacidad cognitiva. Existen muchos estudios que muestran la importancia del yodo durante la gestación, cuando se forma el potencial cognitivo. Una madre con niveles de yodo adecuado, tiene más probabilidad de tener a su hijo con el desarrollo cerebral superior.
Resultados de la deficiencia de yodo
La deficiencia de yodo tradicionalmente se observa en el hipotiroidismo, el bocio y el cretinismo. Los investigadores tienen como hipótesis, que la deficiencia de yodo también puede dar lugar a un deterioro sutil de la función tiroidea que conduce a síndromes clínicos semejantes al hipotiroidismo o enfermedades que se han asociado con la aparición de hipotiroidismo. Los estudios han descrito varios cuadros clínicos sospechosos de estar vinculados a la deficiencia de yodo, incluyendo la obesidad, déficit de atención con hiperactividad (TDAH), trastornos psiquiátricos, fibromialgia y tumores malignos.
El yodo y el selenio son oligoelementos esenciales para el funcionamiento de la glándula tiroides y la biosíntesis de hormonas tiroideas y el metabolismo.
Una tiroides poco activa puede estimular la retención de agua, dando lugar a un exceso de peso y celulitis. La función tiroidea se ha relacionado recientemente con el letargo y la depresión.
Tip de interés
Las dietas de moda, las dietas de ayuno y la de líquidos, pueden afectar el equilibrio de tu cuerpo debido a la ausencia de ciertas vitaminas y minerales. En ese caso, será más difícil bajar de peso y faltarán ganas de hacer ejercicio debido a la fatiga.
